Al hablar de la imagen apropiada, ya sea en el vestir, en un espacio físico, oficina o comercio o incluso en cómo se edita un documento escrito, se debe seguir una serie de reglas para dar la sensación de responsabilidad y excelencia que causa la mejor impresión a todos, tanto lectores y socios como potenciales clientes del negocio. Con las nuevas tecnologías existentes, estos requerimientos aplican hasta en un diseño web Bilbao.

Las mínimas directrices que deben ser consideradas en esta área son:

• Balance y simetría entre los componentes de la página: por norma general, el logo con el hipervínculo que lleva al sitio principal está situado en el extremo superior izquierdo. Aparte de eso cualquier configuración es aceptable, siempre y cuando tenga una secuencia, si no inmediatamente intuitiva, por los menos fácil de deducir de un vistazo.
• Equilibrio de matices: sin importar si se escogen pocos o muchos colores, la clave reside en elegir de base el más neutral y utilizar el resto para decorar. E independientemente de que se usen patrones repetitivos o contrastantes, hay que saber medirlos de modo de no herir la vista del visitante.
• Pulcritud: aunque no se dejen cosas fuera de lugar, también es posible ser desordenado digitalmente. Para evitarlo se recomienda mantener los textos bien espaciados, la alineación justificada, la ortografía correcta y solo una o dos tipografías. Las fotos y otros elementos gráficos, de calidad, no pueden superponerse con las palabras. Esto se logra con una adecuada programación HTML.
• Buenos modales: obviando el insultar directamente al público, aún hay comportamientos que lo podría exasperar y llevar a decidir que es preferible cerrar la ventana que continuar navegando. Ejemplo, publicidad intrusiva que distraiga del texto, ventanas de anuncios que abran al hacer clic sobre un link o imágenes demasiado pesadas que tardan en cargar, entre otros.

Se observa entonces que el ser humano es por naturaleza atraído a la armonía y el orden; y no es necesario entrar en detalles de cuánto cuesta permanecer así. Y aquellos emprendedores que quieran aumentar sus probabilidades de venta, han de tener el cuidado de invariablemente mostrar el perfil óptimo.